Busca el Balance: en tu vida, en la Fuerza, pero sobre todo, en tus drinks

Foto por: Will Shenton

A todos nos ha pasado: tienes calor y pides una michelada (o chelada, como se le conoce fuera de la CDMX), y en lugar de servirte la deliciosa mezcla de cerveza con el jugo de medio limón, hielos y un poco de sal escarchando el vaso, te trajeron medio litro de limón, algo de cerveza diluida en hielo derretido, y tanta sal que hasta sed te dio después del primer trago. Definitivamente una experiencia lamentable.

Ahora, cierra los ojos y recuerda esa vez que tomaste la versión perfecta de tu bebida favorita. Puede haber sido en un restaurante o en una boda y en una de esas, más que recordar lo que comiste, te acuerdas de ese gran mesero o cantinero que te preparó los mejores tragos de tu vida. Seguro hasta sonreíste al recordar.

Si lo piensas un poco, si usas los mismos ingredientes, la única diferencia entre ese drink y los que te preparas en casa y que saben “bien” pero les falta ese “algo”, es la mano del que lo prepara.

Ese gran drink seguramente fue preparado por alguien que personifica el dicho de “a ojo de buen cubero”, que de manera consiente sabe cuánto de cada cosa tiene que usar para que el sabor sea “perfecto”. Y lograr el balance de un trago es justamente eso, es saber el papel que cada elemento tiene en la bebida de forma que ninguno domine y que todos estén presentes, complementándose.

¿Y cuál es la mejor forma de acercarse a ese balance? Practicando, empezando con una receta, midiendo los ingredientes, conociendo a qué saben, y afinando la receta a tus ingredientes, es decir, balanceándola.

Usemos de ejemplo a la Margarita, que se prepara con tequila, licor de naranja y jugo de limón verde. ¿Cuánto usas de cada uno? La respuesta es sencilla si te aprendes la fórmula 2:1:1, que se traduce en 2 partes de licor fuerte, 1 parte de un elemento dulce y 1 parte de un elemento ácido, y en nuestro caso:

2 partes de tequila 100% agave
1 parte de licor triple sec de naranja
1 parte de jugo de limón verde recién exprimido

Cada tequila tiene un perfil de sabor propio, usa el que quieras, pero asegúrate que sea 100% agave. Los limones con semilla son más ácidos (y pequeños) que los limones sin semilla; puedes usar el que quieras (¡o una mezca de ambos!). Y sobre el licor triple sec de naranja, tienes la opción de usar el Cointreau francés o el Controy mexicano,  y cada uno tiene un nivel de dulzura distinto. Por cierto, la Margarita tradicional se prepara shaken, la versión frozen de la licuadora no es la original.

La receta te da la base para construir tu Margarita.  El tequila que elijas va necesariamente a determinar si le debes poner 1 parte de licor triple sec de naranja, o si quizás necesita un poco más o un poquito menos. De igual forma, qué tan ácidos están tus limones va afectar el sabor final de tu coctel.

Una Margarita preparada siguiendo las proporciones 2:1:1 va a saber muy bien, pero una hecha pensando también en qué ingredientes estás usando y cómo se mezclan entre sí, te aseguro que tendrá un sabor (quizás después de un par de pruebas) muchísimo mejor; balanceado.

De tarea te invito a que te prepares una Margarita este fin de semana.  La receta completa para una Margarita tradicional, con medidas  e instrucciones de cómo prepararla, la puedes encontrar dando click aquí.

¿Pefieres pedirla en un restuaruant o bar? Lo bueno de la Margarita tradicional es que es tan sencilla que le puedes pedir al mesero/bartender/cantinero que te la preparen a tu gusto, en cualquier lugar que tengan tequila.  Sólo acuérdate de esto: la fórmula 2:1:1 con Tequila-Cointreau-Limón, pedir que te la preparen en el Shaker, y servida en un vaso Old Fashioned lleno de hielos. No tengas miedo en pedir las cosas como tú las quieres.

Cuéntame en los comentarios qué tequila utilizaste, en qué lugar la pediste y si te gustó o no, si preferiste usar tequila reposado en lugar de blanco, etc.  Pero lo que más me gustaría saber es si encontraste el balance perfecto para tí del coctel mexicano más famoso del mundo: la Margarita.

Cheers,
Pato

Dato para Cocktail Geeks: Aunque el consenso es que la Margarita se inventó en el norte del país (al parecer en Tijuana, Baja California) en los años 1930s-40s por algún bartender extranjero, y tuvo su auge en los 70s, hay un libro inglés de 1937, el Café Royal Cocktail Book, que hace referencia a un coctel llamado Picador que se prepara siguiendo la fórmula 2:1:1 con tequila, Cointreau y jugo de limón (verde o amarillo), aunque notablemente no se menciona el escarchado de sal en el trago.

Foto por: Will Shenton